Sep 15
Letras 1910, Alanís, Carranza, Cerro del Jilguero, Chinameca, Duarte, Guajardo, Morelos, Plan de Ayala, Silva, Tlatilzapán, Zapata
Autor: Isaías Alanís.
Nobles conciudadanos, honrados compatriotas
valle y tengan a bien me presten su atención.
Hoy vamos recordando a los grandes patriotas
que en gran descanso estén de Dios y la mansión.
El pueblo Plan de Ayala fue el teatro de esta escena
el año incomprensible: 1910
quince nos persiguieron, las armas mexicanas
batiendo castellanos de confin en confin.
Honor estima y gloria al héroe de Morelos.
Emiliano Zapata, nuestro libertador,
con letras de oro escrito su nombre esté en la historia,
porque del campesino, él fue el defensor.
También hubo otros hombres que exhalaron su vida
en aras de la causa de tierra y libertad,
el polvo del olvido ha borrado sus nombres
así les ha pagado la ingrata humanidad.
Zapata fue el apóstol, lo quiso así el destino
porque tomó el camino de espinas y dolor,
quiso poner en alto la idea del agrarismo
con una fe inviolable y dómnico valor.
También hubo otros hombres, entre otros generales
como Camilo Duarte y Cliserio Alanís,
hombres dignos de gloria que por la causa agraria
derramaron su sangre y dieron su porvenir.
El Cerro del Jilguero mil veces vio a Zapata
con espuelas de plata montar vio su alazán
y con su treinta treinta, igual que sus muchachos
gallardo caminaba para Tlatilzapán.
Más tarde Chinameca vio caer a su caudillo
acribillado a tiros, con ventaja y traición.
Carranza fue el cerebro, Guajardo fue el verdugo
para llevar a cabo tan vil ejecución.
Por fin triunfó la causa, la hacienda es el ejido
ya los verdes maizales se miran con primor;
los signos de aquel tiempo de Marcianito Silva
un poeta zapatista y dómnico cantor.
En paz descansen todos los hombres que murieron
y altivos perecieron en la revolución
y de aquí en adelante tenderemos con orgullo
un templo en cada pecho y en cada corazón.
Sep 08
Letras Atencingo, Chalco, Cuernavaca, Genovevo de la O, Guerrero, Jantetelco, Jesús Zardaneta, Jojutla, Madero, Méndez, Milpa Alta, Montaño, Morelos, Pacheco, Plan de Ayala, Salazar, Tepalcingo, Topilejo, Zapata
Autor: Jesús Zardaneta.
Voy a cantar un corrido
que vale más que la plata,
los versos son dedicados
a mi general Zapata.
Zapata tomó las armas
en el feliz mes de enero,
para ayudar a la causa
de don Francisco I. Madero.
Zapata estuvo ayudando
a Madero en sus afanes,
para que bien con despacio
rectificara sus planes.
Pero Zapata mirando
que el tiempo ya se pasaba
y que bienes y promesas
de eso ya nunca se hablaba.
Ya perdida la esperanza,
al águila batió su ala,
Zapata tomó las armas
y proclamó el Plan de Ayala;
y dijo: si Madero olvidó el Plan
que enarboló en su bandera
yo sí cumpliré el de Ayala
aunque perezca en la guerra.
Eso dijo este valiente
y su estandarte tomó
y con valor y fervor
en Morelos combatió.
El grandioso Plan de Ayala
nos lo cumplirá Zapata
con sus triunfos de Morelos,
de Guerrero y Cuernavaca.
Él tuvo varios combates,
como soldado valiente,
animaba con su ejemplo
a los jefes y a su gente.
Como Juan Francisco Méndez,
lo mismo que Salazar
y don Panchito Pacheco
juntos iban a pelear.
Genovevo de la O,
cuyo nombre no es extraño,
Fortino Ayaquica es otro
valiente como Montaño.
Milpa Alta, Jojutla y Chalco,
Jantetelco y Atencingo,
Juchitepec, Tres Marías,
Topilejo y Tepalcingo.
Estos puntos recorrieron
combatiendo sin igual,
hasta llegar triunfantes
a la hermosa capital.
En los tres puntos del sur
hoy lo quieren con lealtad.
porque nos da la justicia,
paz, progreso y libertad.
Muchos decían que Zapata
nos atraería graves males,
que entrando en la capital
se verían barbaridades,
pero todo fue mentira,
nadie lo puede negar,
porque entraron muy correctos
soldados en general,
dieron garantías al pueblo
para mostrar su lealtad,
dando así fama y honor
a su digno general.
Viva el general Zapata,
viva su fe y su opinión,
porque se dispuso morir
por su patria,
como hijo de la nación.
Sep 01
Letras Azteca, Calles, Carranza, Cerro de las Campanas, Cristo, España, Hidalgo, Lerdo, Ley del 6 de Enero, Madero, Obregón, Plan de Ayala, Reforma Agraria, Tierra y Libertad, Washington, Zapata
Autor: Liga de Comunidades Agrarias del Estado de Veracruz.
Cuando el gachupín llegó
hace cuatrocientos años,
a despojar de sus tierras
a todos los mexicanos.
Trescientos años duró
la desmedida ambición,
arrasando por completo
hasta nuestra religión.
Esos hombres emplumados
caminaban con destreza,
de su civilización
que hable el Calendario Azteca.
Este pueblo de Cuauhtémoc
no lo podrán dominar,
él luchará por sus tierras
para libre trabajar.
En mil ochocientos diez
Hidalgo fue a la campaña,
para arrojar al burgués,
a ése que vino de España.
Entre Hidalgo y Morelos
hubieron hombres sublimes,
también hubo ambiciosos
como Agustín de Iturbide.
Lerdo y Juárez escribieron
para el mundo la jornada,
que ya grabada quedó
en el Cerro de las Campanas.
Por sus tierras ha peleado
este pueblo con denuedo
por eso se levantó
con don Francisco I. Madero.
La burguesía mexicana
miró la cosa tan cierta,
-mataremos a Madero;
de eso que se encargue Huerta.
Zapata se levantó
con su valor insurgente,
y el gobierno lo mató
con puñal terrateniente.
Se hacen las revoluciones
en Washington sin tardanza;
para asesinarlas luego,
como le pasó a Carranza.
Desde Madero a Obregón
son diez ya los presidentes
que ha cambiado la Nación,
y seguimos como siempre.
El Plan de Ayala nos trajo
un porvenir que no es fijo;
esa Ley del Seis de Enero
que parece a la de Cristo.
Toda la Reforma Agraria
es una mera ilusión,
para Tierra y Libertad
hay que hacer expropiación.
Para vengar tanto mal
de la burguesía asesina,
todos los proletariados
a empuñar la carabina.
Nuestro dolor aconseja
esta medida unionista
bastante ya hemos sufrido
al pie del latifundista.
Sánchez ya se levantó
De la Huerta y fachismo,
para pelear contra Calles,
también contra el agrarismo.
Los agraristas pa pronto
salieron a la pelea,
y a muchos de los huertistas
les quitaron la zalea.
Obreros de la ciudad
anden con mucho cuidado
no se queden como en ésta
como los guajolotes colgando.
Viva la Internacional
de campesinos valientes,
en su gran lucha mundial
contra los terratenientes.
Aquí se acaba el corrido
debajo de los encinos,
vivan los trabajadores,
que vivan los campesinos.
Aug 05
Letras Adelita, Benito Juárez, Callejas, Carlota, Don Porfirio, Madero, Maximiliano, Morelos, rielera, Tequilera, Zapata
Autor: Pino Ruiz Vázquez.
El corrido mexicano
que es anécdota viviente
de las hazañas del pueblo
que luchó valientemente.
Quiero rendirte homenaje
en este mes de noviembre
porque describes paisajes
y esto queda para siempre.
Desde época colonial
el pueblo escribe su queja
dolido de tanto mal
por el español Callejas.
El pueblo también cantó
a aquel gran Benito Juárez
que en armas se levantó
tomando grandes ciudades.
El corrido está presente
con la emperatriz Carlota
Maximiliano y su gente
están escritos por nota.
Y llega la revolución
la época de Don Porfirio
y México es una canción
aunque sufra sus martirios.
Tú le cantaste a Madero
lo hiciste de corazón
cuando dijo al pueblo entero
no queremos reelección.
También cantaste a Zapata
porque luchó por su anhelo
también le cantaste a Cuautla
y al estado de Morelos.
Zapata echaba balazos
y luchaba como fiera
pues no queremos pedazos
queremos toda la tierra.
Zapata con los rurales
arriba mi muchachada
derrumbaba federales
ni trabajo le costaba.
Villa y Zapata se unieron
se jugaron el albur
unos al norte se fueron
y otros se fueron al sur.
El corrido es idealista
le cantaba a la Rielera
le cantaba a la Adelita
También a la Tequilera.
El corrido le ha cantado
siempre otorgando sus fallos
a los hombres afamados
y también a sus caballos.
Mi recuerdo es una ofrenda
porque yo creo que esto sí es cierto
Zapata es viva leyenda
porque Zapata no ha muerto.
Jun 05
Letras Chinameca, Cuautla, Guajardo, Huerta, Jáuregui, Madero, Ozumba, Pablo González, Palafox, Tepaltzingo, Villa, Yautepec, Zapata
Vengan a oír estos versos
todos con mucha atención,
de un gran suceso ocurrido
que comenta la Nación.
El jefe Pablo González
ideó sus planes certeros,
para poder dominar
al Estado de Morelos.
Primero vengo a contarles,
la historia de un guerrillero
desde que se pronunció
hasta su fin tan postrero.
En mil novecientos diez
en armas se levantó,
y al grito ¡Viva Madero!
al gobierno combatió.
Luego Zapata y sus fuerzas
cuando Madero triunfó,
por causas no conocidas
de nuevo se sublevó.
Y todos bien recordamos
cuando la traición de Huerta,
Zapata aun siendo rebelde
no se mezcló en la reyerta.
Cuando el cuartelazo infame
del día nueve de febrero
al Estado de Morelos
fue en automóvil Madero.
No se sabe a qué negocio
Madero fue a Cuernavaca
el caso es, sin contratiempo
conferenció con Zapata.
Por fin Huerta por los suyos
fue elegido Presidente
pero Zapata en Morelos
juró a Huerta darle muerte.
Villa y Carranza en el norte
juraron con buen esmero
vengarla sangre regada
del Presidente Madero.
Luego entre Villa y Carranza
un disgusto aconteció,
pero Emiliano Zapata
con Villa sí confrontó.
Se unieron Villa y Zapata
como buenos compañeros,
uno peleaba en el Norte
otro en el plan de Morelos.
Con Orozco y De la Barra,
con Carranza y otros más,
Zapata jamás no quiso
hacer convenios de paz.
El famoso Plan de Ayala
era esa la única bandera,
que Zapata reclamaba
para terminar la guerra.
Las causas que reclama
ese plan en realidad
es el reparto de tierras,
Democracia y Libertad.
Pero Zapata renuente
nunca quiso someterse,
para que buenas doctrinas
un gobierno las cumpliese.
Por fin Carranza, señores,
mandó fuerzas federales,
a combatir a Zapata,
por montes, pueblos y valles.
Pues el general González
al frente de mil guerreros,
fue mandado por Carranza
al Estado de Morelos.
En un mes de operaciones
los soldados carrancistas
quitaron Cuautla Morelos,
a las fuerzas zapatistas.
González dio garantías
a muchos jefes surianos,
para rendirse al gobierno
en conformidad de hermanos.
Muchos jefes zapatistas
mirando las garantías,
a Zapata abandonaron
en todas sus correrías.
Zapata viéndose solo
con muy poco contingente,
acudió a su gran astucia
para reclutar más gente.
A fines del mes de marzo,
del año que está presente,
Zapata mandó una carta
a Guajardo urgentemente.
Guajardo era coronel
de las tropas de Carranza;
pero logró de Zapata
hacerse de gran confianza.
Zapata mandó otra carta
hasta Cuautla astutamente,
a donde le aconsejaba
se volteara con su gente.
Guajardo le contestó
nomás espero el dinero,
para pagarle a las tropas
y pertrecharlas si puedo.
Veinte cargas de maíz
tengo yo que recibir,
si es que usted las necesita
se las puedo conducir.
Pues el general Guajardo
fingiendo estar rebelado
salió de Cuautla Morelos,
con sus tropas bien armado.
Guajardo salió de Cuautla
con mucho gusto y contento
al Rancho de Chinameca
para estar de destacamento.
Al licenciado Palacios
mandó Zapata al instante
al Rancho de Chinameca
como su representante.
Cuatro cartas se mandaron
uno y otro en la ocasión,
a donde se profesaban
una gran estimación.
La última carta mandó
Guajardo en contestación,
donde le dijo a Zapata
quedo a su disposición.
La primera orden que dio
Zapata sin dilación,
que a Bárcenas lo matase
por jugar alta traición.
Guajardo dijo a Zapata
es difícil comisión,
porque Bárcenas se encuentra
en Cuautla en esta ocasión.
Mi general, le obedezco
todo lo que mande usted,
pero mejor fuera bueno
tomar Jonacatepec.
Por órdenes de Zapata
Guajardo salió de allí
y la plaza fue tomada
el 8 del mes de abril.
Aunque el combate fue corto
con los falsos “zapatistas”
hubo siempre algunos muertos
de las fuerzas carrancistas.
En Tepaltzingo esperaba
Zapata de gusto henchido,
al valiente de Guajardo
por el triunfo ya obtenido.
Ya todo el plan de González
estaba casi concluido,
para poder agarrar
a Zapata muerto o vivo.
Una mujer se acercó
a Zapata desmayada,
diciéndole que Guajardo
quería hacerle una celada.
Zapata oyó los consejos
de su amiga sin igual,
y también formó sus planes
para evitar cualquier mal.
Muchachos, dijo Zapata,
tengan mucha precaución,
vigilen bien a Guajardo
que quiere hacernos traición.
Como a las tres de la tarde
Guajardo se dirigía,
a darle parte a Zapata
del gran triunfo de ese día.
Zapata dijo a Guajardo
que en prueba de estimación,
celebraran ese triunfo
con un gran comelitón.
Pero el coronel Guajardo
fingiendo estar fatigado
dijo que no podía ir,
por estar un poco malo.
Que mejor ese festín,
se efectuara al otro día,
en Chinameca, a su jefe
un banquete le ofrecía.
Zapata al fin accedió
a la oferta de Guajardo,
para ver si de ese modo
allí podía capturarlo.
Guajardo dijo a sus tropas
que al llegar su contrario,
a Zapata se le hicieran
honras de divisionario.
Que para el segundo toque,
contraseña anticipada,
los soldados sin demora
harían descarga cerrada.
Al llegar a Chinameca
Zapata algo malició,
y cogiendo luego su arma
el combate se trabó.
Se posesionó muy bien
para poder resistir,
pero a los pocos momentos
ya no pudo combatir.
Muerto cayó en aquel sitio
por una bala certera,
terminando allí su vida
en su trágica carrera.
Varios jefes zapatistas
fueron hechos prisioneros,
y otros abandonaron
el Estado de Morelos.
Palafox allí murió,
Jáuregui fue capturado,
y en Cuautla de Morelos
fue también ejecutado.
El cadáver de Zapata
a Cuautla fue conducido,
para que por todo el pueblo
fuera bien reconocido.
Cuando en Morelos se supo
la nueva que aconteció
toda la tropa con dianas
toda Cuautla recorrió.
De Ozumba y de Yautepec,
de México y Cuernavaca
iban a ver el cadáver
del que en vida fue Zapata.
Tres días estuvo su cuerpo
a la vista de la gente,
hasta que fue sepultado
el día doce del presente.
Así terminó su vida
un jefe de guerrilleros,
criollito de Nenecuilco
del Estado de Morelos.
Ya este corrido he cantado,
me despido con afán
si en algo estuviere errado
las faltas perdonarán.
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